El Vapor Cortès / edificios con historia L a aparición de la máquina de vapor fue fun- damental para la industrialización vivida en Cataluña a partir de mediados del siglo XIX, sobre todo para el sector textil. Los telares y las máquinas de hilar dejaron atrás las es- tructuras de madera y se adaptaron a los nuevos me- canismos hechos de hierro fundido que necesitaban espacios mucho más grandes para su instalación. De ahí que a finales del siglo XIX comenzaran a levantarse grandes edificios industriales y, de este modo, la antigua fábrica pasó de ser un sitio de trabajo a un lugar de gran producción y, sobre todo, un espacio arquitectónico de mucho interés. La construcción de los conocidos como “vapores” –grandes edificios que acogían diversas fábri- cas que utilizaban la misma máquina de vapor– atrajo a miles de trabajadores, lo que provocó el crecimiento de localidades como Terrassa, Sabadell o la misma Barce- lona, cambiando el paisaje urbano gracias al impulso del modernismo, el estilo imperante en la época, muy del gusto de los promotores, constructores y arquitectos. El sonido ensordecedor de grandes máquinas ha dado paso al murmullo de las conversaciones gracias a la rehabilitación de estas naves industriales. Una intervención respetuosa con la sensibilidad y la inclusión social que ha resultado ganadora del premio Re-FAD de Arquitectura 2025 y del primer premio de la Casa de la Arquitectura, en la categoría de “Cohesión”. texto_ Harquitectes fotos_ Adrià Goula planimetrías DIMENSIÓN URBANA Y SOCIAL La calle abierta entre las naves no solo es un paso, también quiere tener una entidad propia como lugar de estancia ciudadana.