CGATE / pROFESIÓN CGATE / pROFESIÓN tienen que ajustarse a lo que el mercado les ofrece. Hoy podemos hablar del problema de la vivienda como una auténtica pandemia social de nuestro tiempo”. También el presidente de GAD3 y sociólogo Narciso Michavila expresó su inquietud, ya que “la vivienda es el principal eje de desigualdad intergeneracional que existe en este país, De poco sirve subir el salario mí- nimo interprofesional o mejorar la capacidad salarial de los jóvenes si estos, aunque ganen más, tienen cada día más dificultades para pagar su vivienda. O empezamos a desbloquear el techo para que los jóvenes puedan desarrollar su proyecto vital o no hay solución”. Según Alfredo Sanz, “estamos viendo cómo antes de aceptar un empleo o estudiar en otra provincia, los jóvenes tienen que buscar una vivienda, lo que es prácticamente imposible”. Además, manifestó que el mercado está obligando a los ciudadanos “a adaptarse a viviendas de mala calidad”, mientras se normalizan términos como nuevas formas de habitar para camuflar la precariedad. En este sentido, la vivienda está per- diendo su carácter de refugio y de espacio de convi- vencia: “Reclamamos políticas decididas que garanticen viviendas accesibles, de calidad y adaptadas a las ne- cesidades reales de las personas”, añadió el presidente del CGATE. Entre los principales obstáculos que compartieron los intervinientes durante la jornada, destacaron la fis- calidad elevada, la burocracia que ralentiza la puesta en marcha de nuevos proyectos y la falta de seguridad jurídica. Rollán recordó que España registra ya “45 tri- mestres consecutivos de incrementos en el precio de la vivienda, con subidas del 12,7% en el último año y máximos históricos en seis comunidades autónomas”. Además, el presidente del Senado subrayó la brecha entre oferta y demanda: mientras la producción anual ronda las 120.000 viviendas, la creación de nuevos ho- gares se sitúa en torno a 260.000, más del doble. “Nos enfrentamos a una colisión”, advirtió, antes de insistir en que, “sin seguridad jurídica, no habrá oferta de vivienda”. Un problema común a todos. El impacto emocional no es exclusivo de los jóvenes. El barómetro refleja que cuatro de cada diez mayores de 65 años manifiestan su preocupación por sentirse solos en el futuro. Por ello, durante la jornada se desarrollaron dos mesas de diá- logo, también moderadas por Pedro Piqueras. La primera –Vivienda y soledad no deseada: un diá- logo intergeneracional sobre salud mental–, fue protago- nizada por la sociedad civil. Blanca Jiménez, psicóloga de la Fundación Alicia y Guillermo (organización dedicada a ayudar a las personas mayores); Lázaro González, de la Plataforma de Mayores y Pensionistas; Hugo Pérez, estudiante de Derecho y Ciencias Políticas; y María Car- ballo, estudiante de Economía y Ciencias Políticas, anali- zaron las barreras que existen en el acceso a la vivienda, tanto para jóvenes como para mayores. Lázaro González alertó del riesgo de enfrentar a las generaciones, porque la vivienda es un problema que afecta a todos. Mientras, Blanca Jiménez puso el foco en la falta de accesibilidad de los edificios, en muchos de los cuales todavía no existen ascensores, que impide a los mayores socializar. En el lado de los más jóvenes, María Carballo se mostró preocupada por la falta de consenso político y social, lo que frena la búsqueda de soluciones efectivas, y Hugo Pérez planteó que la vivienda se ha convertido en un problema estructural que debería abordarse de una manera integral. En la segunda mesa de diálogo, sectorial y política, centrada en La vivienda como problema colectivo: ten- der puentes para abordar su gestión, intervinieron Gema Gallardo, codirectora de Provivienda; Juan Antonio Gó- mez-Pintado, presidente de Vía Ágora y presidente del Clúster de la Edificación; Javier Izquierdo, senador del Grupo Socialista y portavoz de la Comisión de Vivienda; y Sergio Sayas, portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados y responsable de vivienda. Según Juan Antonio Gómez-Pintado, “el problema de la vivienda no está en el coste de construcción, sino en la inseguridad jurídica y en la excesiva burocracia que convierte al capital en especulativo. Si vas a comprar un suelo pero pasan veinte años hasta que puedes desa- rrollarlo, ¿quién invierte en eso?”, expresó. Gema Gallardo advirtió, asimismo, que “el sinhoga- rismo oculto –esto es, aquellas personas que se ven obligadas a compartir piso o vivir en infraviviendas– va a crecer con fuerza en España. Una crisis de accesibili- dad como la que estamos viviendo no la he visto en mis treinta años de carrera”, confesó. En este sentido, parte de la clase media está pasando a un estatus menor. Medidas políticas. El debate político no tardó en ha- cerse presente en la Cámara. El senador socialista Ja- vier Izquierdo defendió las medidas impulsadas por el Gobierno, como la reciente Ley de Vivienda y el nuevo Plan Estatal 2026-2030. También defendió los topes al alquiler en las zonas declaradas tensionadas y la puesta en marcha de un registro único de alquileres de corta estancia para controlar la oferta turística. En cambio, Sergio Sayas, portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso, criticó que el Ejecutivo no esté atacando el problema real: la falta de oferta. “El control de rentas no soluciona nada si no se construyen más viviendas”, afirmó. Las discrepancias surgieron también en torno a la fallida Ley del Suelo, pactada entre PSOE y PNV con el apoyo del sector, pero rechazada en el Congreso, y sobre la que ironizó Gómez-Pintado: “Los caminos de la política son inescrutables”. La jornada concluyó con una idea transversal: España necesita medidas valientes, alejadas del populismo, que aborden la vivienda como un problema estructural. El presidente del Senado, Pedro Rollán, reclamó “agilización administrativa, mayor oferta de suelo, reducción de la fiscalidad y el fomento de la colaboración público-pri- vada”. Por su parte, el presidente de GAD3, Narciso Micha- vila, pidió desterrar mitos sobre las causas de la escasez de vivienda, como el auge de los pisos turísticos o la compra por parte de extranjeros. Y utilizó un símil: “Si el agua tuviera la misma carga regulatoria que la vivienda, sería un producto de lujo y todo el mundo tendría que beber Coca-Cola”. El presidente del CGATE, Alfredo Sanz, cerró el de- bate recordando que “la vivienda debería ser el pilar del bienestar. Apostar por espacios saludables y entornos que fomenten la vida comunitaria es invertir en bien- estar y en el futuro de nuestra sociedad, de nuestros jóvenes”, finalizó. Esta jornada sirvió para acercar posiciones en torno a un problema que, según el CIS, se ha convertido en el primer motivo de preocupación del ciudadano, la vi- vienda, que ya trasciende la situación generacional. Tanto Alfredo Sanz como Narciso Michavila adelan- taron que ya están trabajando en una tercera edición de este Barómetro de la Vivienda basado en datos, que se ha convertido en un documento de estudio por parte de todas las Administraciones. • según el CIS, la vivienda se ha convertido en el primer motivo de preocupación para los ciudadanos de todas las generaciones