Una fortaleza laberíntica. A punto de celebrar su cin-cuenta aniversario (para conmemorar la efeméride, Calpe ha declarado 2023 como Año Ricardo Bofill), La Muralla Roja se enmarcaba en un proyecto cuyo objetivo era, se-gún el propio estudio del arquitecto, crear “un jardín del edén con una visión idílica del mundo”. La emergente clase media de los años sesenta estaba dispuesta a invertir en una segunda vivienda junto al mar, y los constructores comenzaban a satisfacer esas necesidades mediante edifi-cios que albergaban hileras de apartamentos con terrazas exteriores donde la cantidad prevalecía sobre la calidad o la estética. Estaba claro que el concepto de Bofill distaba mucho de aquello: colapsar el paisaje con apartamentos playeros al uso no estaba en sus planes, sino que soñaba con integrar sus edificios en el entorno donde se levan-tarían, desafiando la corriente dominante. edificios con historia / La Muralla Roja