permitir la ventilación natural y reducir la transmisión térmica al interior del edificio. En función de la categorización de los fabricantes, también se pueden encontrar otras subtipologías como: fachada con muro invertido, fachada modular, fachada intercalaria, fachada semiestructural, etc. En cualquier caso, en este tipo de fachadas los valores de transmi-sión térmica, factor solar, transmisión luminosa, índice de aislamiento al ruido aéreo, y otros parámetros, son fundamentales para obtener unas buenas prestaciones. Por todo lo indicado, son fachadas de alto componente tecnológico. Como matiz, indicar que ciertos especialistas solo lla-man muro cortina propiamente dicho a aquellas soluciones que pasan de forma continua por delante de los forjados y fachadas panel a las soluciones en las que la subestruc-tura se interrumpe en cada forjado, delimitando plantas o zonas independientes. Dado el carácter de prefabricación del sistema, re-sulta fundamental el buen funcionamiento de las juntas entre las piezas, la cual debe ser seca, dado que una jun-ta húmeda (y por tanto in situ) le restaría versatilidad y ralentizaría el montaje. Esta junta debe garantizar la es-tanqueidad al agua y al aire, el drenaje, así como absor-ber los efectos de presión, succión y dilatación. • Fachadas de chapa conformada Están constituidas por un sistema constructivo que no es tan tecnificado e industrializado como el anterior. Se hallan formadas por fachadas ligeras constituidas de chapa de acero, ya sea con geometría lisa, microperfo-rada, perfilada, ondulada o nervada, estando las alturas de sus cretas entre 30 y 60 mm, normalmente. Las cha-pas suelen tener un espesor de 0,6/0,7/0,8/1/1,2 mm y el tipo de protección habitualmente es galvanizado o galvanizado-prelacado. A este componente metálico, se le suma otro que es el aislamiento que se incluye en el centro de dos unidades de chapa simétricas, formando un panel sándwich (prefabricado o no). MUSAAT / pROFESIÓN