ganización, dividiéndola en dos apartamentos, uno más pequeño en planta baja y otro más grande en planta alta, pudiendo combinar ambos. La casa consta de tres plantas –baja, primera y ba- jocubierta–, con el patio central de columnas y un patio lateral con pozo y alberca, con una superficie construida total de 590 m 2 . Asimismo, se consideró de gran impor- tancia la apertura de una puerta a la plaza para acceder al patio central desde la ciudad sin pasar por las zonas privativas y revitalizar una esquina de la plaza muy de- teriorada, lo que, a la postre, fue un acierto. Durante la obra, el arquitecto estaba preocupado por la recupera- ción del patrimonio y el uso de materiales actuales que no desvirtuaran la esencia y la historia de la casa. Por ello, eligió baldosas de barro para el pavimento del pa- tio en planta primera y planta baja interior, así como el hormigón desactivado en exteriores. De la misma manera, una premisa del equipo fue la reutilización de los materiales sobrantes, como baldo- sas, tejas, madera, etc., y el aporte de nuevos materiales reciclados, en especial la madera empleada en el patio, que sirvió para realizar nuevas carpinterías de ventanas o barandillas. Dicha madera se aprovechó de la demo- Planimetrías trabajos artesanos En toda la obra ha estado muy presente el buen hacer de canteros, carpinteros y escayolistas, que han efectuado sus tareas con el mimo y cuidado que precisa una rehabilitación respetuosa con la historia del inmueble.