la intervención en infinidad de áreas, algunas de ellas con trabajos a gran altura, para facilitar su planificación, or-ganización y control, se optó por dividir la obra en tres partes totalmente independientes. La primera se ceñía a la intervención en la parte infe-rior de la torre –su base–, que abarcaba la demolición de las escaleras exteriores y la modificación de sus accesos, la construcción del nuevo forjado a doble altura en el atrio con su óculo central, el aparcamiento público modificado diversas veces por el ayuntamiento, la remodelación de la zona comunitaria de la piscina posterior, la cubierta de los accesos a los tres niveles del aparcamiento comunitario, los trabajos de jardinería… En definitiva, toda la obra exte-rior, con una superficie de más de 13.000 m2 de actuación, realizada a nivel de la calle. Constituía una obra civil de gran envergadura y de un importante presupuesto, pero de poca complejidad. La segunda se circunscribía a las reformas interiores de los 216 apartamentos ya terminados de ambas torres, siguiendo las directrices y soluciones de los pisos piloto realizados de forma simultánea al proyecto de ejecución. Representaba un trabajo de volumen considerable, es-tandarizado, para llevar a cabo con esmero y cuidado de «No puedo dejar de pensar en los 144 pilotes de 150 cm de diámetro y sus 14 metros de profundidad, donde apoyaba la losa armada, de 2,50 metros de canto. Era la cimentación necesaria para soportar un coloso de 55 plantas» Guillermo Campos Oliver. Director de la ejecución. portada / Edificio Intempo