PROFESIÓN / MUSAAT o realizadas in situ), si bien lo más habitual es colocar bardos cerámicos sobre los que se dispone un mallazo y se vierte una capa de compresión de mortero de ce- mento. No obstante, las arquetas prefabricadas suelen traer sus propias tapaderas, las cuales son del mismo material que estas. Es muy deseable que la ubicación real donde se si- túan las arquetas (especialmente las no registrables, que no se podrán visualizar) se mida y acote, para po- der trasladar estos datos a los planos finales de obra, de tal forma que se tengan perfectamente situadas todas ellas en caso de que hubiera que acceder por situacio- nes de entrape. Según su uso o función, las arquetas pueden ser normalmente ‘de paso’, ‘a pie de bajante’ o ‘sifónicas’ (de este último tipo se limitará su colocación al mínimo imprescindible, si bien la normativa prevé su disposición en encuentros entre los conductos de aguas pluviales y los residuales). En la Figura 3 se incluyen todas las va- riantes más habituales de las mismas, como resultado de la combinación con los materiales más comunes que hay en el mercado, ya sean in situ (fábrica de ladrillo u hormigón in situ) o prefabricadas (normalmente, poli- propileno, PVC u hormigón prefabricado). Indicar, no obstante, que también hay otras tipo- logías, como arquetas-sumidero, arquetas de bombeo, arquetas decantadoras, arquetas separadoras de gra- sas, etc., que necesitarán ser dimensionadas y diseña- das según cada caso en concreto. PROPUESTA DE IDENTIFICACIÓN GRÁFICA El Código Técnico no incluye en su articulado una ma- nera de representar los distintos elementos o piezas constitutivas del saneamiento, de forma que exista una grafía unificada para poder utilizar en los planos. Hay que tener en cuenta que si se quiere diferenciar los mismos en función de que exista o no un sistema se- parativo, y en función de los distintos materiales o sis- Fig. 3: tipos de arquetas según su material, fabricación y función.