A. B. C.: Ninguno que no se encuentren en cualquier tipo de edificio sin protección del patrimonio. Las personas que en-cuentran dificultades para visitar un museo o un edificio que forma parte del patrimonio, también las suelen tener para acudir al centro de salud, la universidad, su puesto de tra-bajo o en el disfrute de su ocio: accesos e itinerarios imposi-bles, desniveles, pavimentos inadecuados, pasos estrechos, puertas de difícil apertura, escaleras mal diseñadas, falta de equipamiento de seguridad (barandillas, pasamanos, protec-ciones), una inadecuada señalización que permita orientarse en el espacio, iluminación deficiente, dificultades de comu-nicación… Y la gran olvidada de la accesibilidad, un plan de evacuación y sus instalaciones de seguridad necesarias que contemplen la existencia de personas (en situación de dis-capacidad) en el interior del edificio. Y esto último lo pongo entre paréntesis porque la frase debería quedar como “un plan de evacuación que incluya la existencia de personas en el interior del edificio”. Si pensamos en las personas que visi-tan un edificio, pensaremos en personas con sobrepeso, muy altas o muy bajas, mujeres embarazadas, bebés, mayores SECTOR / Accesibilidad y patrimonio